¿Qué es un suelo?
Lilit Pogosyan y Simoneta Negrete
Artículo publicado en la Crónica y el Portal Comunicación Veracruzana el 06 de octubre 2022
Un suelo es un recurso no renovable indispensable para nuestra vida, sobre todo para la alimentación. ¿Por qué no es renovable, y que es exactamente? Aquí te contamos.
Palabras clave: suelos, factores de formación, actividad humana
Si le preguntas a alguien “¿Qué es un suelo?” algunos te van a decir que un suelo es lo que hay en el piso, otros te van a hablar sobre una capa obscura que se encuentra en la superficie en su jardín, otros van a contar de lo que han visto en campos o en bosques. ¿Pero entonces que es realmente y como aparece? El suelo no es solamente lo que observamos en la superficie, sino una capa de la corteza terrestre que a veces llega a tener una profundidad de hasta unos dos metros o más, y está compuesta de capas que llamamos horizontes. Además, el suelo tiene tres componentes: el sólido, líquida y gaseoso. Un punto muy importante es que contiene organismos vivos, que son un elemento indispensable del suelo.
En 1883 Vasili V. Dockucháev determinó por primera vez los cinco factores que dan lugar a la formación del suelo, el primero de los cuales es el tiempo y los otros cuatro son:
- El material parental, que es la base a partir de la cual se desarrolla el suelo y que determina la composición mineralógica y la textura. Por ejemplo, si el material parental está compuesto de arena de cuarzo, estos suelos van a tener mejor drenaje, pero a su vez una composición mineralógica pobre y no van a acumular mucha materia orgánica que son la clave de la fertilidad del suelo.
- El clima, cuyas temperaturas, lluvia y viento, determinarán la velocidad de transformación del material parental. Por ejemplo, un suelo que se forma en climas fríos va a tener menos actividad biológica y más lenta transformación de los materiales originales;
- El relieve, que es un factor que determina las corrientes de agua pasan por el suelo y su exposición a diferentes condiciones climáticas (por ejemplo, las laderas que están en sombra o tienen mucho sol) o la erosión, como en caso de laderas muy inclinadas.
- La biota, que son los organismos vivos, incluyendo las plantas y animales habitan en la región y que interactúan con el suelo. En bosque de pinos, por ejemplo, las agujas de pino al descomponerse acidifican los suelos debido a su composición química En cambio en los suelos de las estepas, donde la vegetación tiene poco peso en la superficie, pero tiene gran cantidad de raíces, las raíces favorecen la acumulación de materia orgánica y en conjunto con otros factores resulta en formación de unos suelos muy fértiles y más básicos.
Estos cinco factores determinan la formación de todos los suelos naturales que se han formado, desde los desiertos hasta los bosques tropicales, desde las montañas hasta las llanuras, suelos acuáticos y de muchos otros ambientes. Dichos factores determinan la evolución del material parental y de qué manera se va a transformar con el tiempo, o sea, qué procesos van a ocurrir dentro del mismo. El tiempo es muy importante porque al inicio de su formación suceden unos procesos y pasados 100 años suceden otros y después de miles de años otros completamente diferentes. Los suelos más complejos y más transformados se tardan hasta unos 10 000 años para formarse. Esto significa, mientras un suelo está en formación, cambia la vegetación, el clima, el paisaje y se agrega o elimina material parental.
Sin embargo, el dia de hoy nos damos cuenta de que existe un sexto factor determinante de los suelos, que es la actividad humana La humanidad desde el inicio de su existencia siempre ha dependido de la calidad del suelo y de esto depende nuestra alimentación y otras necesidades. Nuestras actividades causan cambios en la naturaleza que afectan a los suelos de manera directa (erosión o contaminación) o indirecta, como la deforestación que incrementa el escurrimiento de agua en el suelo, provocando erosión; o la acumulación de los gases de efecto invernadero que provoca que se descongele el permafrost, la capa subterránea del hielo que se ha mantenido durante años en lugares como Alaska, Canadá, Siberia y las altas montañas en México.
Entonces ¿Por qué es importante saber cómo se forma el suelo? Porque sólo de esta manera nos damos cuenta de que un suelo se forma en un tiempo mucho más largo que la vida humana, y por eso, si lo destruimos, para nosotros ya no es renovable. Tenemos que cuidar los suelos, y tratar de restaurar los daños que nuestras actividades les han causado, nuestra vida depende de ello.